La Hermandad de Nuestra Señora de la Soledad fue fundada a mediados del siglo XVI al amparo del entonces Convento de Santo Domingo. De su solemne y severa procesión el Viernes Santo, a la que asistía el Ayuntamiento, dirá el historiador Medina Conde que era “el simulacro de la mayor veneración del pueblo”. De la pujanza de la hermandad en la época moderna nos hablan, tanto la pertenencia a la misma de la nobleza local, la creación bajo su tutela de la Hermandad de Arcabuceros, así como la obtención, a partir de 1756, de la “Misa de Privilegio” que se celebraría cada Sábado Santo por la demostrada intercesión de su Sagrada Titular en el salvamento de la tripulación de una fragata de la Armada Española.
La Pontificia y Real Congregación del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas y Nuestra Señora de la Soledad es el resultado de la fusión, en el verano de 1915, de la Antigua Cofradía de Nuestra Señora de la Soledad, con la Hermandad del Santísimo Cristo de la Buena Muerte y Ánimas. Creada en 1862. Hito decisivo en esta Hermandad sería el descubrimiento primero, y la permuta después de su originario crucificado titular por el incomparable Cristo atribuido a Pedro de Mena.
La Virgen de la Soledad era una dolorosa del siglo XVIII, titular de la antigua hermandad de Nuestra Señora de la Soledad, al amparo del convento de Santo Domingo. Realizaba su salida procesional el Viernes Santo y asistían el Concejo y todos los nobles de la ciudad. Hay que reseñar la obtención de la ‘Misa de Privilegio’ a celebrar cada Sábado Santo por la intercesión de la Virgen en el salvamento de la tripulación de una fragata de la Armada española frente a las costas malagueñas. Momento en el que nace una vinculación de Nuestra Señora de la Soledad y la Armada. Esta Dolorosa se procesionó hasta 1943 que fue sustituida por la talla actual, otra Dolorosa adquirida en Antequera que databa del siglo XVIII, aunque un reciente estudio, realizado por el historiador Jesús Romero, otorga un siglo más de antigüedad a la imagen, que es obra de Antonio del Castillo.
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